Es rosa. Tiene los pétalos enredados como si estuvieran a
punto de soltarse del tallo, a punto de caer a los pies del jarrón de
cristal. Sin embargo llevan meses suspendidos, aferrándose unos a otros,
abrazados. Desde el jardín, al otro lado del ventanal cientos de ramas de hojas
verdes observan; es una pose muy artística, en un armonioso desequilibrio,
agonizante… Digno de una obra de Dalí.
Precioso, María.
ResponderEliminarMuchos besos.
Gracias Mar, besitos.
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